Fue un partido de diez en todos los aspectos. Desde que bajamos del autobús, mostramos una actitud muy positiva. Desde el inicio, estuvimos muy atentos en defensa y contraataques. El arbitraje fue excepcional, sin dejarnos pasar ni una a ninguno de los dos equipos, lo que nos benefició al defender sin meter mano y lanzarnos con todo hacia canasta, consiguiendo muchas jugadas de 2+1.
La defensa intensa, las acciones en estático y la salida de la presión fueron claves durante todo el encuentro. Finalmente, no pudimos llevarnos la victoria, pero logramos una enorme victoria moral a nivel personal.
-Jesús Llorente-